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Una de las teorías sobre esta elección es en homenaje al uniforme de los obreros ; otra, en cambio, habla de la relación del color azul con el del manto de la Virgen de los Ángeles, Patrona de Getafe. Si en España se habla de verdiblanco, automáticamente se piensa en el Betis . Son dos versiones, ambas de color negro, una de ellas con un pata de pulpo y otra con una cerveza, dos productos muy conocidos de esta zona de España. La historia del color blanco del Valencia es como tantas otras que se entienden mejor conociendo el contexto de su nacimiento. 328 votos para la albiceleste que se quedó con la miel en los labios en el Mundial de Brasil. 635 votos para la camiseta más gallega nunca diseñada. Y es que pocas cosas definen más a un equipo que su camiseta y sus colores. Desde que el cuadro hispalense naciese en 1890 quiso lucir los colores rojiblancos . A cambio, la entidad colchonera pidió a los directivos rayistas que incorporasen a su equipación algún detalle rojo para que sus elásticas se pareciesen más a las del Atlético en lugar que a las del cuadro merengue . En el momento en el que decidieron unirse, los directivos de ambos equipos prefirieron no utilizar ni el rojo ni el azul, los colores de sus equipos.

La única variación que ha sufrido la indumentaria « txuri urdin » ha sido la intensidad del color azul, más claro en las recientes temporadas. Con la zurda, soltó un zapatazo centrado que blocó sin problema Maignan. Las rayas rojiblancas del Atlético tienen mucho -o todo- que ver con el origen de las del Athletic . La indumentaria rojiblanca del Athletic nace de un error, camiseta inter milan de un despiste. En 1910 el Athletic comenzaba a vestirse con su ya traidicional uniforme. Tal y como recoge la web del club, este uniforme quería representar «la vocación con la que nacía la nueva entidad: ser baluarte del fútbol de toda Galicia». El origen del mismo se debe a las excelentes huertas de pepinos con las que contaba la ciudad. El rojo y blanco de su camiseta acompañó a la entidad desde su surgimiento, cuando tomó el relevo de otros equipos de la ciudad como el Unió Esportiva Girona, fundada en 1921 y que vestía de amarillo y azul marino. El amarillo inicial se debe a que era el color de la pieza de ropa que uno de sus primeros socios regaló a la entidad para que confeccionase sus uniformes, tal y como se informa en la web del club.

En los años anteriores el Alavés vistió de blanco, pero finalmente el club acabó adoptando el « albiazul » que tanto le caracteriza. Es cuanto menos curioso que el Sevilla vista de blanco por un error. Al igual que sus vecinos valencianistas y como en la mayoría de equipos de fútbol, la falta de opciones en cuanto colores les obligó a vestir con camiseta blanca y pantalón negro. Todos los consejos coincidían en que tenía que darle valor al esfuerzo realizado para que todos los entrenadores que ha tenido hayan contado con él, que siguiera entrando en los planes del club y lo que no tiene precio: ser el primer capitán del Real Madrid. Sin embargo, en 1941 se produjo un punto de inflexión en la trayectoria del club. Sin embargo, Juan Elorduy , encargado de esta tarea, dejó los deberes para el final y cuando quiso hacerse con los uniformes blanquiazules del Blakburn Rovers ya no quedaban. Durante sus casi primeros veinte años de vida vistió de blanquinegro , para posteriormente pasar por dos modelos blanquiazules y terminar en el rojiblanco .

La Real Sociedad luce con orgullo desde su creación en 1909 los colores blanquiazules en honor a la bandera de San Sebastián . Después de jugar sus primeros años de blanco y luego y después de blanquiazul, en 1909 la directiva del club viajó a Inglaterra con el encargo de comprar camisetas. Más adelante, en 1909 , pasó a vestirse con los colores del blasón del almirante Roger de Llúria , almirante de la flota de la Corona de Aragón: blanco y azul . El equipo sevillano lucía en sus origenes el azul en la camiseta y el blanco en el pantalón, una indumentaria que ha lucido como segunda equipación durante varias temporadas. Para distinguirse de sus rivales de la comunidad, en 1946 decidieron cambiar al color amarillo, uno de sus mayores emblemas y con el que se ganaron el apodo de « submarino amarillo ». Por aquel entonces, lejos de lo que cabría imaginarse, el Espanyol vestía de amarillo .