Sin embargo, el partido, en el que Maradona erró un penal, terminó con un triunfo de los rosarinos por 1-0. La revancha sería una semana después frente a Racing Club de local, encuentro que terminó 1 a 1 y le brindó su único título conseguido en el fútbol argentino. A pesar de esto, Boca llegó a pelear por el título pero perdió todas las posibilidades luego de perder contra Racing, en la famosa despedida del Piojo López, en la que Maradona erró su quinto penal consecutivo. Maradona abandonó el Barcelona habiendo jugado un total de 58 partidos y marcado 38 goles. Maradona fue operado en Barcelona por el doctor González Adrió, y pese a que las primeras evaluaciones diagnosticaron un periodo de recuperación de hasta seis meses, reapareció solo tres meses y medio después, el 8 de enero de 1984, cuando contribuyó con dos goles a que el Barcelona derrotase al Sevilla por 3-1. Al final, Maradona solo pudo jugar 16 partidos aquella temporada, en los que marcó un total de 11 goles, por lo que no pudo contribuir a que el Barcelona consiguiera el campeonato: quedó tercero.
Maradona reapareció el 12 de marzo de 1983, en un partido contra el Betis, pero el Barcelona no pudo ya aspirar a la Liga y solo consiguió la cuarta posición, quedando a seis puntos del campeón, el Athletic Club. Dejaba de respirar durante lapsos de cinco o seis segundos”. A diferencia de su debut con Argentinos, esta vez se desquitó y, con dos goles suyos, Boca superó a su rival por 4 a 1. Maradona jugó ese partido infiltrado, ya que durante el último entrenamiento con Argentinos había sufrido una molestia muscular en su pierna derecha. La sensación del jugador de que la directiva del F. C. Barcelona no lo había defendido en forma suficiente ante la Real Federación Española de Fútbol, aumentó el distanciamiento entre Maradona y el presidente Núñez, que anteriormente lo había criticado por considerar que no cuidaba lo suficiente su vida privada, ya que las salidas nocturnas empezaron a ser constantes en su vida. Tras su participación en la Copa Mundial de Fútbol, en la que la selección argentina se hospedó en Barcelona, se oficializó su venta al Fútbol Club Barcelona.
El gol anotado en el Estadio Santiago Bernabéu, y que supuso la victoria barcelonista, provocó la ovación del público madridista, que reconoció la belleza del gol pese a ser marcado por el conjunto rival. La misma, disputada en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid el 5 de mayo de 1984, enfrentó al Barcelona con el Athletic Club, el vigente campeón de Liga, con el que los catalanes mantenían una dura rivalidad. El 24 de septiembre de 1983 se enfrentaron en el Camp Nou el Barcelona y el Athletic Club, en el partido correspondiente a la cuarta fecha de la Liga. Sin embargo, el Barça tuvo un excelente rendimiento en las copas domésticas, ya que el 4 de junio de 1983 ganó la Copa del Rey en Zaragoza frente al Real Madrid por 2 a 1 con goles de Víctor y Marcos. En enero de 1982 se disputó el Torneo de Verano, donde Maradona jugaría sus últimos encuentros en Boca ya que luego debió concentrarse con la selección para el Mundial de España.
El partido suponía el reencuentro entre Maradona y Goikoetxea, el jugador con el cual tuvo el choque que le provocó la lesión. Se perdió 14 partidos de Liga y las eliminatorias de la Recopa de Europa, en la que el Barcelona, mermado por su ausencia, quedó eliminado. El periodista Jimmy Burns, en la biografía de Maradona titulada La mano de Dios, reveló la agitada vida privada que Maradona había llevado en Barcelona, donde por primera vez tomó contacto con las drogas. Si bien fue principalmente un creador de juego creativo, Maradona también fue conocido por su habilidad para rematar y anotar goles. Esa sanción que lo alejaba de los terrenos de juego españoles hasta diciembre de 1984, fue una de las razones que empujaron al presidente del Barcelona, José Luis Núñez, a aceptar una oferta del Napoli italiano para traspasar al argentino. Tras finalizar en el 2003 su vínculo contractual con su representante, Guillermo Cóppola, comenzó un juicio en el que el jugador le reclamó el pago de 2 millones de dólares en concepto de lo ganado, entre otros asuntos, en su partido homenaje. El partido finalizó con un empate en un gol, permitiéndole a Argentina clasificar como mejor tercero.